Una
maestra decidió llevar este proyecto a la comunidad, para ver que clase de
influencia tendría en ella. Dio a cada uno de sus estudiantes tres cintas, y
les dijo que fueran e hicieran conocer a otros esta ceremonia de reconocimiento
personal.
Entonces
tendrían que hacer un seguimiento de los resultados, ver quiénes honraron a la
clase la semana siguiente. Uno de los chicos de la clase fue a donde un joven
ejecutivo de una compañía cercana, y le reconoció por haber planificado su
carrera. Colocó una cinta azul en su camisa, y luego le dio otra de las cintas.
-
Estamos haciendo en la clase un proyecto sobre reconocimiento -le dijo- y nos
gustaría que usted busque a alguien quien admire para que le dé una de las
cintas azules, y la otra para que esa persona haga lo mismo con alguien más, a
fin de mantener esta ceremonia en marcha. Una vez hecho esto, por favor,
infórmeme que sucedió.
Más
tarde, ese mismo día, el joven ejecutivo fue a ver a su jefe, quien a propósito
tenía fama de ser un individuo gruñón y de mal humor. Lo hizo sentar y le dijo
que lo admiraba profundamente por ser un genio creativo. El jefe se sorprendió.
El joven ejecutivo le preguntó si aceptaría la cinta azul como regalo, y le
pidió permiso de colocársela en el pecho.
-
Seguro, hazlo - contestó su sorprendido el jefe-.
El
joven ejecutivo tomó la cinta azul y la colocó en el saco del jefe, sobre su
corazón.
-
¿Me harìa un favor?, le dijo mientras le daba la última cinta, quisiera tomar
esta cinta extra, y darla como prueba de admiración a alguien más, el chico que
me dio estas cintas está llevando acabo un proyecto de su escuela. Queremos
mantener en marcha esta ceremonia de reconocimientos, y ver como afecta a las
personas.
Esa
noche el jefe llegó a su casa, se dirigió a su hijo de catorce años de edad y
se sentó con él.
-
Hoy me sucedió algo increíble, le dijo. Estaba en mi oficina cuando uno de los
jóvenes ejecutivos entró, me dijo que me admiraba y me dio una cinta azul por
ser un genio creativo.
Después
la puso en mi saco, sobre mi corazón, esta cinta azul que dice "Lo que yo
soy, es lo que importa". Me dio una cinta extra y me pidió que encontrara
a alguien más a quien reconocer. Mientras manejaba a casa esta noche, empecé a
pensar a quien honrar con esta cinta, y pensé en ti.
Quiero
darte este reconocimiento. Mis días son realmente agitados y cuando llego a
casa no te presto mucha atención. A veces te grito por no sacar buenas notas en
el colegio, y por tener tu dormitorio echo un desastre, pero esta noche quiero
sentarme contigo aquí y hacerte saber que tú eres importante para mí. Tú y tu
madre son las personas más importantes de mi vida. ¡Eres un gran chico y te
amo!
El
sorprendido muchacho comenzò a sollozar, y no pudo contener las lágrimas. Todo
su cuerpo se sacudió.
-
Papá, le dijo llorando y mirándolo firmemente, estaba planeando suicidarme
mañana porque pensaba que tu no me querías. Pero ya no necesito hacerlo!
Marcos
6:34
Y
saliendo Jesús vió grande multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como
ovejas que no tenían pastor; y les comenzó á enseñar muchas cosas.
Proverbios
12:26
El
justo hace ventaja á su prójimo: Mas el camino de los impíos les hace errar.
Romanos
15:2
Cada
uno de nosotros agrade á su prójimo en bien, á edificación.
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